Manuel Quintín Lame. Antonio Caro. Restauración

La obra del maestro colombiano Antonio Caro (1950) se enmarca dentro del arte conceptual, para lo que utiliza formas no tradicionales con el fin de plasmar su mirada crítica sobre las condiciones sociales del país. Dentro de sus representaciones artísticas encontramos el uso materiales relacionados con las prácticas culturales indígenas, fotocopias, logos icónicos modificados, instalaciones, conferencias, y como en el caso que nos ocupa hoy, carteles tipográficos, que gracias a la fuerza de sus textos han logrado convertirse en obras disruptivas dentro del ámbito del arte nacional e internacional.

Fotografía inicial y final de la obra

El cartel «Manuel Quintín Lame – Homenaje» fue impreso con tipos móviles de madera sobre papel edad media (soporte celulósico de pasta de madera) de 70 gr. de tamaño 100 x 70 cm y presentaba un alto estado de deterioro, debido a un montaje inadecuado sobre un cartón de alta acidez, combinado con el uso de adhesivo para papel y posteriormente, de cintas adhesivas para unir rasgaduras. Presentaba dos lagunas grandes, que incluían la pérdida de parte de la impresión tipográfica; así mismo, otras pérdidas de soporte de menor tamaño. Tanto el anverso como el reverso de la obra presentaba alto grado de suciedad superficial acumulada, rasgaduras de gran tamaño y deformación de plano.

A continuación se describe el proceso de intervención realizado:

El cartel estaba adherido a un cartón, presentaba deformación de plano, faltantes y múltiples rasgaduras, que fueron unidas con cintas adhesivas
La acidez de las cintas y el adhesivo utilizados para adherir el cartel sobre el cartón causaron manchas de oxidación que se ven reflejadas en el anverso de la obra.
Además de las manchas de oxidación y los residuos de adhesivo, son notables las múltiples rasgaduras, faltantes y arrugas que presentaba la obra
Se retiró el soporte de cartón y se eliminaron las cintas adhesivas
Para poder continuar con los procedimientos de lavado, se requiere retirar los restos del adhesivo de la cinta mediante procedimiento mecánico. Para ello, se realizan pruebas de solubilidad previas.
Eliminación de los restos de cartón adheridos al cartel
Proceso de limpieza acuosa por capilaridad mediante la utilización de Sontara. Este procedimiento se realiza tantas veces sea necesario hasta que el documento quede en el punto que queremos, respetando por supuesto, la pátina del mismo.
La translucidez del Sontara cuando está humectado permite monitorear el proceso permanentemente
Una vez hecho el lavado, se prepara la obra para el doblaje
El doblaje o laminación por el reverso es necesario para darle estabilidad y protección a la obra. Durante este proceso de unen las rasgaduras. Se realizó sobre papel japonés con fibra de Kozo, lo que garantiza resistencia y flexibilidad, y se adhirió con almidón refinado Jin Shofu
Tensado y secado de la obra por tensión sobre un karibari (superficie de madera preparada especialmente para procesos de restauración de papel)
Se realizaron pruebas con diversos tipos de pigmentos para tinturar el papel japonés con el que se elaboran los injertos, hasta dar con el tono más cercano al papel original.
Detalle de la elaboración del calco para realizar el injerto en papel japonés
Se realizan diversas pruebas hasta que se logra el color más cercano al papel original
Una vez se han completado las lagunas y unido las rasgaduras, se realizó reintegración mimética para mejorar la apariencia estética del cartel.
La reintegración del color negro se realizó con pigmentos Kremer para conservación, únicamente sobre los injertos. Los faltantes de tinta que presenta el original debido al desgaste de los tipos de madera, se mantuvieron intactos con el fin de no caer en falsos históricos y respetar la obra.
Resultado final